Definición: El perímetro cefálico es considerado una medida indirecta del crecimiento global del cráneo y sus estructuras, además de ser uno de los parámetros auxológicos más importantes durante los primeros años de vida.

Puntos de referencia: Debe medirse desde el punto más prominente de la región posterior del cráneo (opistocranion) y el punto más saliente del frontal situado entre las cejas sobre una línea tangente a los bordes superiores de las órbitas (glabella).

Elemento de medición: Cinta médica inextensible

Posición: El niño debe estar en posición semisentada entre las piernas y los brazos de la madre, y el observador debe encontrarse por encima del niño, ajustándola lo más posible a la bóveda craneana en posición sentada o acostado en la camilla.

Limitaciones: Se debe estar atento a errores de medición como son el cabello muy denso, la interposición de trenzas o anomalías de la morfología craneal que dificulten la localización de los puntos de referencia anteriormente mencionados.

Interpretación: Denominamos microcefalia cuando el perímetro cefálico se encuentra bajo las – 2,5 DE de la media poblacional y macrocefalia cuando está por encima de +2,5 DE de la media poblacional, no obstante debemos considerar en ambas mediciones el tamaño corporal y analizarse mediante la correlación del perímetro cefálico con la edad talla y no con la cronológica. Además se debe tomar en cuenta el componente genético del tamaño de la cabeza y comparar con la medida del parámetro cefálico de los padres para poder establecer mejor un rango de normalidad.